viernes, junio 24, 2005

Hasta que te vi.

Cortinas caían cavando cuencas.
Hasta que te vi.
Abejas ardían abriéndome antojo.
Hasta que te vi.
Gorriones golpeaban gozosas gametas.
Hasta que te vi.
Acero ablandaba arterias angostas.
Hasta que te vi.
Ratones rugían relocos relocos.
Hasta que te vi, hasta que te vi.

1 comentario:

Anónimo dijo...

jajaja, me habia llegado a conmover el poema(de creación propia??)hasta que me pregunte que viste, hasta que miré bien la versificación y se me fue al carajo toda la sensación del momento; es lo podría llamar CAGAR un poema aparentemente romantico.Pero bue, si hago caso omiso al descubrimiento está bueno el poemilla, es mas, si lo pienso mejor, me queda la duda de la situaciòn en que viste eso, no me quiero imaginar que cosa.todo un problema filosófico. Podria hacer mil interpretaciones, pero sin lugar a dudas vos tenes la posta.